Dolce&Gabbana, Mercedes Benz, Porsche y Armani son algunas de las marcas que han irrumpido en el mercado inmobiliario.
Por: Tomás Rodríguez Botto
El mercado inmobiliario impulsado por marcas de lujo está en un crecimiento constante, según un informe de la consultora inmobiliaria global, Knight Frank: Global Real Estate Consultants, quienes estiman que el mercado de este tipo crecerá en torno al 12% cada año hasta el 2026.
Ante ese panorama es que Dolce&Gabbana, Mercedes Benz, Porsche, Armani, Lamborghini han ingresado al sector con edificios residenciales de lujo en ciudades como Miami, Dubai y Marbella.
En ese escenario, surge la pregunta de qué buscan estas marcas en el mercado inmobiliario, por ello consultamos a Ignacio Garafulich, CEO de Pop Estate, quien advierte que las marcas de lujo pueden tener varios intereses para incursionar en el mercado inmobiliario. “Creo que hay dos razones principales; la primera es capitalizar el valor de marca que ha construido asociándose a desarrolladores inmobiliarios que puedan apalancarse de este valor y generar una propuesta residencial diferenciadora. Además, la posibilidad de adentrarse en la creación de experiencias habitacionales para sus clientes existentes y potenciales, entregando una experiencia de lujo basada en el diseño y los servicios reforzando su imágen e identidad de marca”.
En cuanto a los desarrolladores que impulsan este tipo de edificaciones de lujo, tienen en consideración que la marca tenga una conexión con el producto final, en este caso la vivienda. Cuando una marca ingresa al mundo inmobiliario, puede generar una identidad distintiva al alinear la experiencia de habitar un inmueble con los valores y el estilo de la marca. Lo cual puede lograrse a través del diseño de los espacios y decoración que reflejan el estilo y la estética de la marca.
Ante eso, Garafulich, agrega que, “los desarrolladores inmobiliarios ganan posicionamiento, la posibilidad de apalancarse de la percepción que existe de dicha marca y entregar un producto con el cual tu cliente se sienta identificado con sus valores e identidad”, agrega Garafulich.
Finalmente, hay que considerar que la marca puede ofrecer servicios exclusivos y experiencias personalizadas que complementen su imagen. Al hacerlo, la marca puede crear un ambiente único que atraiga a sus clientes existentes y potenciales, y fortalezca su presencia en el mercado.
Fuente: eldiarioinmobiliario.cl